lunes, 6 de agosto de 2012

Pequeños placeres de la vida .


...


Home , sweet home .


Me gustaría ir a París, mientras me subo a lo alto de la Torre Eiffel y veo toda Francia. ¿Después? A Italia, donde me haré la típica foto donde yo, con toda mi fuerza y valentía, sujetaré la Torre de Pisa para que no se caiga. ¿Luego? A Londres, donde intentaré hacer reír a los guardias de seguridad con mis caras más extrañas y mis chistes malos. ¿Siguiente? A Las Vegas, donde me gastaré la ostia de dinero en el casino para no ganar ni un centimo. ¿Aún más? Pues me iré a Nueva York, sí, y me subiré a la Estatua de la Libertad y veré como todo Manhattan amanece. ¿Y por último? Yo siempre digo que lo mejor, para el final. Por último me iré a Los Ángeles. Arrasaré en todas las tiendas de Beverly Hills, mientras me gasto casi todos los ahorros que me quedan en ropa. Luego, en Hollywood, iré mirando cada una de las estrellas del Paseo de la Fama y me haré una foto con la inmensa mayoría. También, me haré fotos junto al cartel de Hollywood, señalándolo con una gran sonrisa en mi cara diciendo: Sí, estoy en L.A. Y al final, me subiré a lo alto del mirador y miraré por última vez todo Los Ángeles. Pero cuando vuelva aquí, a España, me esperará lo mejor...


Y si te caes coge impulso y te levantas de un salto, con los pies en el suelo empieza a recorrer el camino de tu vida, mirando hacia a todos lados con cuidado a no dejar ningún detalle. Con cuidado de no volver a tropezar y si lo otra vez arriba siempre sonriendo. Camina despacio, sin prisas que el tiempo pasa rápido y es mejor aprovecharlo. Equivócate todas las veces posible, que de los errores se aprende, llora pero no te olvides de sonreír al final, baila y canta hasta que las piernas no te respondan y tu voz deje de funcionar. Salta hasta llegar con lo más alto, pero cuidado con no caer, pues la caída será dolorosa. Gritale al mundo todo aquello que sientes. Cuando llueva sal fuera a bailar bajo la lluvia, con cuidado a no resbalar. Pero sobre todo no te olvides de vivir.